2013/08/11

EL BAILE DE LA ERA EN TUDELA (cuento para tudelan@s)

EL BAILE DE LA ERA EN TUDELA
(cuento para tudelan@s)
¡TIAAAAAAAAA!¡RARARARIAAAAAA!¡RARARIAAARARARIAARARARIAAAA! ¡POM! ¡POM, POM! ¡POM! ¡POM, POM!................
¡TIAAA! ¡TATRIARARIARARIA!¡TARIARARIARARIA!¡RARIARARIARARIARARIARA!¡RIARARIARARIARA....
¡Cagüen Sankalimotko! Sin empezar la Revoltosa y yo que acabo de perder la zapatilla.
“Perdoneusté, ¿Ha visto una alpargata blanca con listones coloráus, así como del 35 al 37, dependiendo de si es USA o CE size?. Hace un momentico la llevaba yo aquí, en el pie, pero mientras me entretenía en buscar el pañuelo para la Era la he perdido”. Y el pañuelo lo mismo, por el bujero del bolsillo del pantalón. Ya me parecía a mí que por 2 euros en el Jesús Clemos 100% chicas no me podían vender gran cosa. “Alguna tarica tienen”, me dijo la dependienta. Y joder con la tarica, que por el boquete se me han ido las llaves del cuarto, el pañuelo y un salvaslip odorfresh tanga que llevaba pa cambiarme después de la corrida (de la de toros).
Bueno, pues me agarraré de mi pareja con la faja, por cierto... ¿Dónde está el tío?.
“¡¡¡PATXIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII!!!”
“¡¡¡PAAAATXIIIIIIIIIIIIIIIIIII!!!”!
Este ha aprovecháu la ocasión para meterse en el mogollón con la rubia esa de los pearcings que hemos conocido en la Beterri. Me temo que ya le hemos visto el pelo en toda la noche.
En fin, yo me meto al corro y busco pareja, que alguno quedará suelto. ¡Ah! ¡Mira la Eva!
“¡¡¡EEVAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!!!”
Me ha visto. Le hago señas, a ver si tiene pareja. No la tiene. Cuando me acerco a ella, me doy cuenta de que mi alpargata cuelga de uno de los barrotes de la barandilla del kiosko. Le grito que me espere e intento encaramarme a la barandilla. Imposible. Están con la Polka Pik y van todos de un lao a otro, moliéndome a codazos. Pero yo soy una tía perseverante y, además, hoy es 24 y aún quedará algún cristalico por la plaza. Y, oyes, por higiene y porque las alpargatas de las cinticas me costaron 7 aurelios, que menudo timo. Consigo llegar hasta la reja a empujones, que me siento como un almonteño frente a la Blanca Paloma. De lo que no hay manera es de alcanzar la puta zapatilla. Les hago señas a los gaiteros, pero ni por esas. Deben de creerse que les quiero pedir el Paquito Chocolatero, porque yo creo que verme, me han visto, pero pasan de mí. Finalmente, me arriesgo a jugarme el todo por el todo y grito: “¡Fernando, o sueltas la flauta y me tiras la alpargata o el Lunes te boicoteo la fragoneta de los Donuts y salen todos rodando por la cuesta del Elola!¡ Que sé que aparcas donde la piscina!”
Yo no sé si es efecto de la amenaza o de que lo haya llamado flautista, el caso es que suelta el instrumento, agarra la zapatilla y me la manda casi al velador del “Aragón”.
“¡Gracias, majo!”, le grito, y me voy corriendo a buscar la alpargata antes de que algún gracioso empiece a jugar a fútbol con ella.
A todo esto, tengo a la Eva esperando como un pasmarote. Ya ha empezado la Era, están con lo de los brinquicos del principio. Nos agarramos con la faja porque ella tampoco tiene pañuelo (compramos los pantalones de 2x1) y le pregunto. “¿Chico o chica?” Mira delante y detrás nuestra. Algo así como las 25 parejas que nos siguen y las 18 que nos preceden son de tías. De modo que pregunto a la que tengo delante “Oye, perdona, ¡Eres chico o chica?”. Quizás hay circunstancias en la vida en que esta pregunta te podría costar una demanda judicial, pero la Era es la Era.
“Pues no lo sé. Espera”. Y le pregunta a la de delante. La de delante pregunta a la de delante y así, hasta que, unas 35 parejas más adelante, hay una de chico y chica. Despejada la duda, la noticia se propaga como la pólvora. Justo a tiempo, porque ya llegamos a los punteos y aquí es importante conocer bien el sexo para no meter la pata. Seguimos el baile y nos acercamos peligrosamente a la jota vieja cuando...¡Joder!¡La chuleta!
¡La llevaba en el bolsillo del boquete!.
“Bien”- me digo- “No nos pongamos nerviosos. Sabemos dónde estamos, sabemos lo que somos... Suponemos que la de delante también lo sabe,...... así que haremos lo mismo que ella.”
Acaba el redoble del tambor y va a sonar la gaita. Yo me repito mentalmente: “Me llamo Inma, estoy bailando la Jota Vieja y hoy soy chico, luego: un, dos, tres hacia la cabeza, vuelta, punteo con la izquierda, un dos tres, un dos tres, engaño, cinco vueltas. Bien, me acuerdo.”
Suena la gaita. La de delante da dos pasos hacia la cola y la de detrás empieza con los punteos con la derecha. Para cuando me quiero aclarar, los del grupo de los Divinos ya están por la tercera vuelta.
Bueno. Seguro que la siguiente sale mejor. Es la que empieza con los punteos con la derecha, el engaño, una vuelta, la jota, un engaño y otra vuelta. Esta vez parece que vamos todas a una. Cinco punteos, engaño a la cola, vuelta “¡Eva, corazón, que las boleras son más adelante! ¡Es que no vamos a hacer bien una maldita serie!”
De lo que no me acuerdo es de la última parte. No sé si eran 6 punteos, dos engaños, el cruce y la vuelta o tres punteos, dos engaños, la vuelta y el cruce. Le pregunto a Eva y me hace señas para que me deje guiar. Una vez que se ha recuperado del lapsus de las boleras la verdad es que la tía está centrada y bordamos la serie. Ahora ya sólo queda la última parte, que para esa no necesito concentrarme. Empiezo con el pie cambiado las boleras, doy una vuelta en vez de vuelta y media y, finalmente, clavo el pie equivocado
Y me doy un golpe de muerte en la rodilla al hacer el saludo final.

Termino la noche en la caseta de Protección Civil. El ATA me mira la rodilla, tuerce el mostacho y me dice que, como mínimo, tres meses de escayola.

NAFARROAKO DANTZARIEN BILTZARRAren WEB BERRIA- NUEVA PAGUINA WEB DE NAFARROAKOA DANTZARIEN BILTZARRA

  OHARRA!!   Jakinarazten dizuegu 2023ko irailaren 1etik aurrera. Paguina honek ez du jarduerarik izango.   WEB PAGUINA berria dugu!!   WEBG...