Una decena de parejas bailaron esta mutil dantza propia de Alsasua
Ayer, día de tradiciones, no faltó unzortziko , baile propio de Alsasua imprescindible en todas las celebraciones de la villa. Para el día grande era un zortziko de mayores, una costumbre que desapareció en los tiempos en que Alsasua dio el gran salto a una sociedad industrial. Fue recuperada en los años 70 por Enrike Zelaia, que se empeña en que no desaparezca. El pasado año el akordeoilari estaba fuera y nadie se animó a tirar del carro.
Tras una intensa campaña, ayer se animaron una decena de parejas. Se bailaron dos zortzikos. El primero, a cargo de Josetxo Urizar, de 63 años, y el segundo a Alfredo Garasa, de 50 años como aurrelari. En los dos estuvo Fernando Mugarza, quien con 83 años todavía baila la jota con mucho aire.Con los txistus, tamboriles y atabal, la banda Municipal de Txistularis: Cruz Mª Martínez, Margari Iglesias, Jesús Irisarri y Josetxo Lumbreras. Ayer también se unió Cristóbal Lanz. Esta banda acompaña a la Corporación en fechas señaladas, 14 a lo largo del año, tres de ellas en fiestas. Asimismo, su música está presente en festividades como Santa Águeda, carnavales o Olentzero.
