Como persona aficionada que soy a nuestras danzas y que lleva unos cuantos años intentando aprender a bailarlas y a disfrutarlas, quiero mostrar mi malestar y desacuerdo con los responsables finales que año tras año poco o nada hacen en preparar un lugar digno y adecuado para que podamos hacerlo en Sanfermines. Algunos años en la Media Luna; con frío, aislada, fuera de la fiesta, con sensación de esconderla; y ahora en la Taconera, junto a la txozna del Oinez, no solo apartada y fría, con un suelo irregular y peligroso, y sobre todo con polvo, mucho, un lugar más apropiado para plantar patatas que para bailar, un lugar para auténticos valientes. Y entre estos quiero agradecer a esas cuadrillas de dantzaris que cada año hacen que esto funcione. Mila esker.
Es una pena como poco a poco van transformando nuestra fiesta y cultura, acercando y facilitando otras músicas y danzas -muy respetables, por supuesto- de otras partes del estado e internacionales. A escondidas ayer, con polvo hoy, y con piedras mañana, seguiremos bailando y destrozando alpargatas.
Karlos Iriarte Elizalde -