Comienza el proceso para declarar los bolantes de Valcarlos como Bien de Interés Cultural Inmaterial. El Gobierno de Navarra ha incoado el expediente por el que comienza el proceso para declarar las danzas de los bolantes de Valcarlos como Bien de Interés Cultural Inmaterial, mediante resolución del director general de Cultura, Pedro Luis Lozano. El Gobierno de Navarra ha incoado el expediente por el que comienza el proceso para declarar las danzas de los bolantes de Valcarlos como Bien de Interés Cultural Inmaterial, mediante resolución del director general de Cultura, Pedro Luis Lozano.En la firma de la resolución, realizada este miércoles en el Departamento de Cultura y Turismo del Ejecutivo foral, han estado presentes el consejero de Cultura, Juan Ramón Corpas Mauleón; el alcalde de Valcarlos, Fernando Alzón; la representante de la Junta de los Bolantes Edurne Valencia; y el bolante Juan Carlos Arrosagaray.
Según ha señalado el alcalde de Valcarlos, este paso supone el reconocimiento a la labor que han hecho los jóvenes de la localidad a lo largo de generaciones. Alzón ha considerado un éxito que en un pueblo de 422 habitantes se mantenga un grupo de 100 dantzaris que conservan el espíritu de esta tradición, que de momento está asegurada porque los niños quieren ser bolantes y desde los 4 ó 5 años van a aprender a bailar.El Ayuntamiento de Valcarlos realizó ante el Gobierno de Navarra la petición para que los bolantes de Valcarlos sean declarados Bien de Interés Cultural Inmaterial, demanda que el Consistorio acompañó de un informe histórico etnológico realizado por el antropólogo Karlos Irujo Asurmendi y el historiador Mikel Ozkoidi Pérez.Los bolantes, nombre que adquieren los dantzaris que realizan estos bailes por las cintas de seda que cuelgan de sus espaldas, constituyen una manifestación del folklore tradicional de la localidad de Valcarlos.
Históricamente, las apariciones públicas de los bolantes se realizaban ligadas a los carnavales. En la actualidad, sus danzas tienen lugar en el llamado Día de Bolantes o Bolant-eguna, que desde los años 70 del siglo XX se celebra el Día de Pascua de Resurrección.En este día, los bolantes comparten protagonismo con el resto de integrantes de la comparsa que los acompaña: zaldikos, makilaris, gigantes, abanderados y músicos, entre otros personajes que los unen a los carnavales.La primera manifestación escrita que hay hasta el momento de los bolantes data de 1832 y es un documento que forma parte de un expediente que el fiscal abre "relativo a cencerradas y otros actos celebrados en Valcarlos".La celebración del Día de Bolantes mantiene gran parte de la estructura organizativa del carnaval, con la danza como núcleo central de la celebración. Los actos de la jornada comienzan con un almuerzo de la comparsa a las 8.30 horas para, a continuación, bailar en la plaza del pueblo.Más tarde, los dantzaris visitan Pekotxeta y el barrio de Bentak y luego se dirigen a Arnegi. En esta localidad, bailan la Bolant-dantza y varios Jauziak. Vuelven a Valcarlos para la comida, haciendo la entrada en el pueblo al son de la melodía de la Bolant-dantza. Tras la comida, en el frontón o la plaza del pueblo, ejecutan el repertorio tradicional de danzas (Antrexantak, Jauziak, Makilarienak, Ddantza-Luzia, Kontra-dantzak, etc.).
Según ha señalado el alcalde de Valcarlos, este paso supone el reconocimiento a la labor que han hecho los jóvenes de la localidad a lo largo de generaciones. Alzón ha considerado un éxito que en un pueblo de 422 habitantes se mantenga un grupo de 100 dantzaris que conservan el espíritu de esta tradición, que de momento está asegurada porque los niños quieren ser bolantes y desde los 4 ó 5 años van a aprender a bailar.El Ayuntamiento de Valcarlos realizó ante el Gobierno de Navarra la petición para que los bolantes de Valcarlos sean declarados Bien de Interés Cultural Inmaterial, demanda que el Consistorio acompañó de un informe histórico etnológico realizado por el antropólogo Karlos Irujo Asurmendi y el historiador Mikel Ozkoidi Pérez.Los bolantes, nombre que adquieren los dantzaris que realizan estos bailes por las cintas de seda que cuelgan de sus espaldas, constituyen una manifestación del folklore tradicional de la localidad de Valcarlos.
Históricamente, las apariciones públicas de los bolantes se realizaban ligadas a los carnavales. En la actualidad, sus danzas tienen lugar en el llamado Día de Bolantes o Bolant-eguna, que desde los años 70 del siglo XX se celebra el Día de Pascua de Resurrección.En este día, los bolantes comparten protagonismo con el resto de integrantes de la comparsa que los acompaña: zaldikos, makilaris, gigantes, abanderados y músicos, entre otros personajes que los unen a los carnavales.La primera manifestación escrita que hay hasta el momento de los bolantes data de 1832 y es un documento que forma parte de un expediente que el fiscal abre "relativo a cencerradas y otros actos celebrados en Valcarlos".La celebración del Día de Bolantes mantiene gran parte de la estructura organizativa del carnaval, con la danza como núcleo central de la celebración. Los actos de la jornada comienzan con un almuerzo de la comparsa a las 8.30 horas para, a continuación, bailar en la plaza del pueblo.Más tarde, los dantzaris visitan Pekotxeta y el barrio de Bentak y luego se dirigen a Arnegi. En esta localidad, bailan la Bolant-dantza y varios Jauziak. Vuelven a Valcarlos para la comida, haciendo la entrada en el pueblo al son de la melodía de la Bolant-dantza. Tras la comida, en el frontón o la plaza del pueblo, ejecutan el repertorio tradicional de danzas (Antrexantak, Jauziak, Makilarienak, Ddantza-Luzia, Kontra-dantzak, etc.).
